“Sembrar un árbol es sembrar vida”.-

Sembrar árboles es promover la vida para la eternidad, que lindo sembrar el ejemplo a temprana edad, desde las montañas, las cordilleras, sierras, en las ciudades, los barrios, bien lo establece la Biblia, que el “que habita al abrigo del altísimo morara bajo la sombra del Omnipotente”.-

Sembrar árboles desde ahora, nos permite obtener unas series de beneficios en todos los aspectos de la vida, por tales razones, desde la posición que nos encontremos de una posición cimera hasta la de menor importancia es deber de todo ciudadano mantener una vigilancia a favor del árbol, a los fines de que no los corten, porque con él se nos va la vida.