Hermanas Franciscanas de los Sagrados Corazones aperturan centenario de su llegada a R.D.

Por: Enmanuel Peña Feliz.

Con una Eucaristía que presidió Monseñor Andrés Napoleón Romero Cárdenas, obispo de Barahona, en la Catedral Nuestra Señora del Rosario, las Hermanas Franciscanas de los Sagrados Corazones y la Comunidad Educativa del Colegio Divina Pastora, dan gracia por el centenario de su llegada a República Dominicana (RD) que celebraran en el 2025 con un gran Jubileo.

En la monición de entrada se relato que un día 22 de febrero del 1925, llegaron las tres primeras hermanas por Puerto Plata y a Santo Domingo el día 25 del mismo mes, para iniciar una misión en República Dominicana, extendiéndose hasta Barahona, dónde llevan más de 70 años con el Colegio Divina Pastora, referente académico y religioso del pueblo barahonero.

Siendo estos años de fidelidad, sacrificio, entrega, amor, estudios y camino, para construir un mundo más humano, solidario y franciscano, rumbo a los 100 años de estudios, 100 años enseñando y dando a conocer el amor de Dios.

El carisma se ofrece en el mundo de la educación cristiana para niños y jóvenes, a la vez que ofrecen asistencia y cuidado amoroso de ancianos y enfermos.

Además de Monseñor Andrés Napoleón, concelebraron los Padre Ángel Cuevas Rosario y Eustaquio Rodríguez.

En la festividad participaron la gobernadora provincial de Barahona Genera González Marmolejos, los padres y alumnos del colegio Divina Pastora, el pasado jueves 22 febrero del presente mes.

Un poco de historia: Las Hermanas Franciscanas de los Sagrados Corazones es una congregación religiosa, fundada por la Beata Madre María del Carmen González Ramos el 8 de mayo de 1884 en Antequera, España. Llamadas a vivir en la Iglesia su carisma franciscano, que mira a Cristo y a María en la grandeza de sus Corazones y anhela enseñar a conocer y amar a Dios. Madre Carmen, decía “Bendito sea Dios, que tanto nos quiere”.

Un 22 de febrero de 1925, se realiza la primera expansión fuera de España. Un grupo de tres hermanas María Ángela de Jesús, Sor Covadonga y Sor María Lucia motivada por la obediencia y la entrega al Señor salieron desde España llegando a República Dominicana, siendo recibida por el Sacerdote Capuchino Francisco de Castro, operando esta en San Lázaro Santo Domingo creando la comunidad la Caridad.

Luego se extienden a otros pueblos, con el colegio Inmaculada Concepción en la Vega, Serafín de Asís en Santo Domingo, colegio Cristo Rey en San Pedro de Macorís, Divina Pastora en Barahona.